sábado, 30 de noviembre de 2013

La verdad de Chehade

Hace dos años Omar Chehade Moya, congresista de la Republica y renunciante vicepresidente del Perú, organizó una cena a la que convocó a varios generales PNP. A raíz de ello, su hermano Miguel fue condenado a cuatro años de pena privativa de la libertad por haber querido presionar a la Policía para ejecutar el desalojo de la azucarera Andahuasi, favoreciendo al Grupo Wong. Chehade fue investigado en la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales y salvado en la Comisión Permanente del Congreso con el voto de Yehude Simon. Gracias a ello, Chehade nunca fue investigado por el Poder Judicial.

Trece votos salvaron a Chehade de la acusación constitucional, además de los de GP, los de Perú Posible y Fernando Andrade de Somos Peru. En su momento, Yehude Simon justificó su apoyo a Chehade diciendo: "Este no es un juicio político sino de pasiones. Chehade tiene derecho a reivindicarse por un error político". Ahora que hay una sentencia que condena al hermano de Chehade, ¿Simon seguirá pensando lo mismo?

Todo esto es público y probablemente usted lo recuerde. La pregunta es: ¿por qué los ciudadanos no hacemos nada? Los congresistas llegan al poder porque nosotros votamos por ellos. Son reelegidos porque nosotros los reelegimos, y no rinden cuentas porque nosotros no se lo exigimos. ¿Es que estamos tan acostumbrados a la mediocridad, a la corrupción y a la mugre que ya ni nos indignamos?

Hoy Chehade preside la Comisión de Constitución y esta semana salió como leal escudero a tratar de distraer a la opinión publica del escándalo López Meneses con la propuesta de la Cámara de Senadores y la inmunidad vitalicia.

Pero tranquilo, hoy nos enteraremos de la verdad de Tilsa, aunque el "Loco" Vargas esté desesperado porque eso no suceda. ¡Next!

sábado, 23 de noviembre de 2013

Soy su hermano pero no sé nada

Resulta que un exoperador de Montesinos es encontrado con una seguridad digna del jefe del Servicio de Inteligencia. Nadie sabe nada.

Sin embargo, en cuestión de horas cayeron varios generales, un ministro y el asesor Villafuerte. Para el Presidente, esto es culpa de la corrupción de la Policía. Con un simple: este es un "bisnes privado" da por cerrado el tema. Los del "bisnes privado" limpiaron el "local" y solo dejaron un betamax. Léase: "¿se acuerdan de los videítos en la salita del SIN? Les adelanto el betamax y si se me portan mal suelto un par".

¿Por qué la sobrerreacción de la pareja presidencial? Si solo se trata de un "bisnes" de policías corruptos por qué cae Villafuerte? ¿Por qué el Presidente le dice basura a López Meneses? ¿Y el desplante a los militares en la juramentación de Albán? Puro circo. ¿Por qué Favre está en Lima?

El affaire López Meneses se suma a otras prácticas ilegales denunciadas previamente como el reglaje a Rospigliosi, el chuponeo y los oportunos audios hechos públicos por periodistas fujicaviares que extrañamente siempre perjudican a la oposición y benefician al gobierno. Cuidado, no vaya a ser que todas estas prácticas tengan un hilo conductor común y que uno de los extremos esté en manos de operadores del gobierno.

Alvarito jala orejas, Cateriano mira para otro lado, queriendo hacernos creer que él manda en Defensa. Albán se ajusta el fajín como si aquí no pasara nada. Rivas, Figallo y demás olvidan que hoy son el Ejecutivo, y por ello serán responsables de lo que se llegue a descubrir. En ese momento, la excusa de la decencia, las credenciales democráticas y el no haber sabido, poco valdrán.

sábado, 16 de noviembre de 2013

La adolescencia perdida

La evidencia empírica ha demostrado que la mejor política social para disminuir la desigualdad y equilibrar las oportunidades de los niños es la inversión en educación de calidad. Un niño que ha recibido una buena alimentación, que ha tenido acceso a servicios de salud y a educación de calidad, estará mejor preparado y tendrá mayores posibilidades de ser absorbido por el mercado laboral y lograr escapar de las trampas de la pobreza. La educación, a diferencia de otras intervenciones, es la única cuyos efectos no pueden perderse. Lo que una persona aprendió, lo llevará y podrá utilizarlo el resto de su vida.

Acceder a educación de calidad no solo es un derecho de los niños, sino que es además un deber de sus padres enviarlos al colegio y del Estado brindar esa educación.

En el Perú, solo 77% de los adolescentes entre los 12 y 17 años asiste al colegio. En las zonas rurales, solo el 67%. En Huánuco y Cajamarca, el 62%, mientras que en Loreto solo el 58%. Más aún, el 37% de los que asisten está atrasado, en grados inferiores a los que les corresponde. Según varios estudios, las adolescentes en pobreza tienden a faltar entre tres y cinco días al mes cuando están menstruando, por falta de acceso a toallas higiénicas y baños en sus colegios. Lo que se traduce en un promedio de 40 días al año perdidos por falta de infraestructura básica.

El embarazo adolescente constituye uno de los mayores problemas. El 13.5% de las adolescentes peruanas ya son madres o están embarazadas. Este es un problema grave, porque una adolescente embarazada tendrá más probabilidades de hacer abandono escolar, limitando su acceso a la educación y con ello sus posibilidades de escapar de las trampas de pobreza. Es además un problema de salud pública: una adolescente no está físicamente preparada para enfrentar el embarazo y parto. Es por ello que los embarazos de adolescentes son riesgosos y con un índice mayor de abortos y complicaciones durante el parto. Por ello, para reducir la mortalidad materna se recomienda retrasar el primer embarazo. Pero además los hijos de madres adolescentes tienen más probabilidades de nacer prematuros y tener bajo peso al nacer. Una madre adolescente es una niña criando un niño. Sabía que de acuerdo con el Código Civil la edad mínima para casare es de 18 años, pero con dispensa de un juez los adolescentes pueden contraer matrimonio a los 16. A esa edad, ninguno de los dos ha terminado la secundaria, pero además a esa edad una adolescente no está preparada para llevar un embarazo. Entonces, ¿por qué es que teniendo toda esta evidencia seguimos aceptando que adolescentes de 16 puedan casarse? ¿No sería mejor darles acceso a educación y servicios de salud sexual y reproductiva, y además a métodos anticonceptivos?

Los estudios han demostrado que el Perú no tiene capital humano para sustentar un mayor crecimiento económico. Necesitamos a los niños y adolescentes en los colegios, recibiendo educación, no en sus casas porque no tienen acceso a toallas higiénicas ni baños ni tampoco en los hospitales dando a luz.

sábado, 9 de noviembre de 2013

Un tanto de Cristo

El Che es la representación suprema de la rebeldía y de la consecuencia. Porque es eternamente bello, eternamente joven, eternamente rebelde. Su imagen se ha convertido en la representación de un cierto tipo de guerrillero, envuelto en un halo romántico. Muchos años después, sigo perturbada por ese rostro que, aun cuando nadie quiera admitirlo, tiene un tanto de Cristo y un tanto de Rimbaud.
Rocío Silva Santisteban


Sin duda admirar al Che, asesino confeso, forma parte de la libertad individual. Escribir sobre esa admiración es libertad de expresión. Pero que quien considera que el rostro del Che tiene un tanto de Cristo y otro de Rimbaud sea la autoproclamada defensora de los DD.HH., ocasiona, cuando menos, una sonrisa sarcástica. Que todas las personas tienen DD.HH., sin importar si se trata de terroristas, militares o civiles, es un hecho incuestionable. Que quien viole los DD.HH. de cualquier persona debe ser sancionado, no está en discusión. Lo que está en discusión es que permitamos que la izquierda, aquella que participó en la dictadura de Velasco, que durante los ochenta admiró –y en algunos casos defendió– la lucha armada, en los noventa trabajó en el gobierno de Fujimori –directamente o a través de ONGs– y que desde la caída del fujimorismo emprendió una cacería de brujas contra todo aquel que no hubiese renegado del Chino, y que encima admira al Che, sea la abanderada de los DD.HH. Sobre todo considerando que son ellos los que niegan los DD.HH de los militares y policías que se jugaron por cada uno de los peruanos en el monte durante la época del terrorismo. Y lo siguen haciendo hoy en el VRAEM. ¿Quién defiende los DD.HH. de los hijos de los militares asesinados por Sendero? ¿Es que la defensa de los DD.HH. depende de quién haya sido el que los violó? ¿Es que los estudiantes de La Cantuta tienen más DD.HH. que los Húsares de Junín que viajaban en el ómnibus que dinamitó Sendero? ¿O tal vez más que el empresario David Ballón, asesinado después de 5 meses encerrado bajo tierra en las cárceles del pueblo del MRTA? ¿Es que el emerretista "Tito" tiene más DD.HH. que los comandos Valer y Jiménez? ¿Qué pasa con los hijos de María Elena Moyano, que saben que los asesinos de su madre están libres? A ellos nadie los lleva a la CIDH. ¿Se ha preguntado alguna vez por qué? Hágame un favor y regrese a la noche del 16 de julio de 1992, cuando escuchó las bombas que destruyeron Tarata. ¿Se acuerda qué fue lo que pensó qué debíamos hacer con los terrucos?

Esa izquierda que dejó pasar por alto las acusaciones sobre Madre Mía con tal de impedir que Keiko ganara las elecciones. Que decidió cambiar la historia sobre la muerte de Pedro Huilca, cuando ese crimen ya había sido reconocido por Sendero. Que nos dice que está probado que los estudiantes y el profesor no eran terroristas, cuando en realidad, más allá de la presunción de inocencia, hay indicios sobre lo contrario. Esa izquierda que ha decidido olvidar y esconder su participación en la dictadura de Velasco. Una verdadera dictadura, con tanques, botas y sin libertades civiles ni poderes más que el del General.
¿Ellos son los defensores de los DD.HH.? ¿Por qué?

Si tuviese la posibilidad de regresar en el tiempo, desearía que Vargas Llosa hubiese ganado las elecciones en 1990. Y me gustaría ver si en su gobierno no hubiese habido Colina, violaciones de DD.HH. ni desapariciones forzadas. Sobre todo considerando que ellas existieron en el cogobierno Belaunde-PPC (1980-1985) y en el de García (1985-1990). ¿Y ahí qué diría el Marqués?

sábado, 2 de noviembre de 2013

Juan Jimenez Mayor y sus calatos

En las últimas semanas varias ONG de izquierda, representadas por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos y Rocío Silva, han tratado de utilizar al pueblo nahua para impulsar su agenda contra la inversión privada y el Lote 88. Ayer, Aidesep, la CNDDHH y DAR se presentaron ante la CIDH para informar acerca de la situación de los DDHH de los pueblos en contacto inicial y aislamiento de la Reserva Territorial Kugapakori, Nahua, Nanti. Muy diligentes presentaron videos y fotos de los avistamientos de los no-contactados: mashco-piros que pertenecen a Madre de Dios y no tienen nada que hacer con el Lote 88.

Los nahua no son no-contactados, ellos se convirtieron en pueblo en contacto inicial en 1984 y hoy son un pueblo asentado. Ellos llegaron a Lima buscando ser escuchados. Resulta que existe un fondo creado por el Consorcio Camisea, en virtud a un convenio firmado con la comunidad que desde el 2001 está en "custodia" del organismo estatal de turno (hoy el VM Interculturalidad) al que, por razones burocráticas, no tienen acceso. Los nahua no se oponen a la inversión privada, ellos quieren beneficiarse del desarrollo.

En Lima se contactaron con el Viceministerio de Interculturalidad para que a través del Estado se les permita participar en la audiencia ante la CIDH. El Estado los ignoró. Sin embargo, llegaron a Washington, a la CIDH y se sentaron en la primera fila, frente a los comisionados. Rocío Silva no solo no los miró sino que en su presentación fue incapaz de informarle a la CIDH que los nahua, a quienes las ONG dicen defender y a quienes llaman "calatos" tenían ropa, pasaporte y estaban en la audiencia listos para ser escuchados y defender ellos mismos sus derechos e intereses.

¿Sabe qué hizo el Estado peruano? Una presentación vergonzosa, sumisa, de cabeza gacha, incapaz de defender los intereses del país. Un representante del Viceministerio de Interculturalidad con una presentación mediocre. Un procurador supranacional incapaz de decir que los nahua estaban ahí para ser escuchados y una representante del MEM, a quien al preguntarle por qué no habían presentado a los nahua y por qué permitían que la CNDDHH presentara fotos de mashco-piros confundiendo a la CIDH, no supo qué decir. Esa es la mediocre defensa del Estado peruano. Un país de ingreso medio-alto. ¡La vedette de Latinoamérica!

¿Por qué el expremier Jiménez y su ministro de Justicia no se preocuparon en recibir a los nahua y en reconocer el esfuerzo que estaban haciendo al viajar a Lima y luego a Washington? ¿Por qué el Estado no los apoya en la defensa de sus derechos y de la inversión privada? ¿Sabe por qué? Porque la caviarada y las ONG de izquierda vienen de las mismas canteras y tienen el mismo "bisnes". Es imperdonable que los nahua hayan llegado a Washington y el Estado no los haya acogido ni apoyado. Es imperdonable que los ministros se preocupen más en filtrar fotos de un expresidente del Perú, viejo, enfermo y calato. Esta es una muestra de la mediocre administración del presidente Humala y del legado de Juan Jiménez Mayor.